DECÁLOGO DE LA ÉTICA DEL PERIODISTA SEGÚN 
Javier Darío Restrepo
“El periodista ha de ser una buena persona” es decir, la profesionalidad del periodista se construye sobre un ser humano y si ese ser humano es de mala calidad no se puede ser buen periodista.
“El buen periodista ha de estar orgulloso de su profesión” y lo que me merezco como periodista es precisamente aquello que resulta de la actividad que ejerzo y de la eficacia con que esa actividad resulta para los demás.
“El buen periodista tiene un sentido de misión en su ejercicio profesional” lo que convierte esta en una profesión muy distinta de la de los burócratas, no hay horario, pero no solamente eso, requiere una entrega total.
“El buen periodista es un apasionado por la verdad” el orgullo del periodista es un orgullo mal fundado si cree que el es dueño de la verdad, uno no es dueño de ninguna verdad, nuestras verdades siempre son susceptibles de ser corregidas, son verdades que la sociedad necesita y quien le va a decir lo que está pasando es el periodista.
“El buen periodista es autocrítico” un primer extremo el del periodista sabiondo ese que mantiene la arrogancia de que yo si me las se todas, por tanto a ese sabiondo le cuesta mucho trabajo aceptar que la crónica que apareció hoy es una crónica que tiene que ser rectificada.
El buen periodista elabora conocimiento y lo comparte” primero usted tiene que preguntarse cuáles son los antecedentes de esa noticia, porque conocer antecedentes significa conocer más la noticia, segundo usted tiene que conocer el contexto en que se produjo esa noticia.